El 1 de noviembre se celebra el Día de Todos los Santos, una festividad centrada en homenajear a los difuntos llevándoles flores como señal de recuerdo.
En este post, te detallaremos las 5 flores más habituales para este día tan señalado:
Crisantemo
La flor más popular del Día de Todos los Santos por su elegancia, hermosura y carga de simbolismo. Podemos encontrar muchas variaciones de crisantemos con distintos colores y formas para realizar, así, perfectos ramos.
No requiere muchos cuidados, sólo luz solar sin que los rayos incidan directamente en la planta. El crisantemo necesita una temperatura suave (no le conviene el exceso de calor ni de frío), de modo que, recomendamos usar agua tibia para conservarlo en perfectas condiciones durante más tiempo.
Rosa
Otra de las reinas del 1 de noviembre. Los rosales florecen durante todo el año, sobre todo, en climas cálidos.
Una flor de uso recurrente en cualquier situación por su elegancia y simbolismo (cada color transmite un mensaje distinto). Muy usada en decoración, también tiene fines terapéuticos.
Clavel
Presenta flores más pequeñas, que desprenden una fragancia exquisita, con una amplia e intensa gamma de colores. Se utiliza muchísimo para realizar ramos o combinaciones de flores.
El clavel es muy fácil de cuidar, su temperatura óptima se sitúa entre los 10ºC y los 24ºC. Con un riego constante, pero no abundante, este tipo de planta necesita abono una vez por semana en primavera y verano y durante el resto del año es suficiente con una vez al mes.
Cala
Otra flor que destaca por su elegancia y que presenta distintas variedades a causa de la experimentación en campos como la botánica y la floristería.
La cala necesita entrar en contacto con un suelo húmedo y mejor si es en la sombra. No lleva muy bien los temperaturas extremas, así que mejor evitar la luz solar directa o las heladas. En este último caso, es recomendable dejar la planta dentro de casa.
Gladiolo
Con una gran presencia y variedad de colores, los gladiolos son perfectos para realizar ramos y arreglos florales. Pueden llegar hasta los 2 metros de altura.
Con una temperatura templada pueden florecer durante todo el año, sino las podemos ver de verano a otoño (su temperatura óptima se sitúa entre los 10ºC y los 25ºC). El riego debe ser abundante al principio y escaso, luego, hasta que aparezcan los primeros brotes.
Todas estas flores son resistentes y duraderas. Para que el ramo te dure más tiempo, recomendamos comprar las flores a primera hora de la mañana. Si el ramos lo haces tu mism@, recuerda que debe ir a una única cara para poder posarlo sobre la superficie.
Fuente: Hogarmania