Todos los aficionados de la jardinería sienten atracción en algún momento por los bonsáis. Plantas que dan un aire oriental a nuestro jardín, que transmiten equilibrio, paz y serenidad.
Una de las principales dudas que surgen en el momento que empezamos a mirar modelos de bonsáis es: es una variedad de interior o de exterior? Qué diferencia hay entre los cuidados?
La diferencia entre ambos es mucho más simple de lo que, en general, creemos pensar. Cuando cultivamos una especie que no es autóctona de nuestra zona, y por lo tanto puede verse afectada por las variaciones climáticas, entonces es un bonsái de interior. Si es una variedad de “casa”, la podremos tener tranquilamente fuera.
Si queremos tener un bonsái de una zona tropical y nosotros vivimos en una zona más bien fría, lo mejor es habilitar un terrario dentro de casa o bien un invernadero. O si el árbol es una variedad que se desarrolla en zonas secas y nosotros estamos en un terreno más bien húmedo, debemos ir con cuidado para que no tenga un exceso de agua.
Con todo, debemos saber que en el mundo de la jardinería no todo es blanco o negro, sino que existen muchos matices y variedades. Aunque un bonsái sea de interior tampoco deberemos tenerlo todo el tiempo dentro de casa ya que se mostrará más débil, sus hojas palidecerán y sus ramas se ensancharán más de lo debido, factor que puede desarrollar plagas. Necesitará también exterior como cualquier otra planta. La única diferencia real que deberemos tener en cuenta es que los modelos de interior exigirán más cuidados, con sumo cura en suministrarles ventilación y horas de sol.