El aloe vera es un planta fácil de cuidar y muy popular en jardines y terrazas. No requiere de grandes cuidados. Tanto si la tenemos dentro de casa como en el jardín, necesita luz (pero tampoco de forma excesiva) y que la reguemos como haríamos con una planta normal. Además, es una planta que se regenera con mucha facilidad. En cuanto veamos surgir los brotes en la tierra, los trasplantamos con cuidado, separándolos de su “madre” sin dañar las raíces.
Existen mucha mitología en torno a las propiedades curativas y regeneradoras del aloe vera. Ayuda a mantener un excelente estado de salud y llena el cuerpo de energía gracias a su alto contenido en titanio, hierro y germanio. Comiendo un trozo de pulpa con el desayuno se fortalece el sistema inmunológico. Posee además excelentes propiedades afrodisíacas. Es ideal para los trastornos digestivos y un buen regulador intestinal.
La utilización de la planta en productos de belleza es muy popular. Penetra fácilmente en las 3 capas de la piel (epidermis, dermis e hypodermis), permitiendo eliminar las bacterias y la grasa acumulada que tapona los poros de la piel. En este sentido, al ser rica en vitaminas, enzimas, minerales y nutrientes naturales, permite la reproducción de células nuevas. Utilizando el aloe vera de manera constante puede evitarse la aparición de arrugas precoces y retrasar el envejecimiento cutáneo.
Es excelente para contrarrestar los efectos después del afeitado, evitando el enrojecimiento y las erupciones producidas por las cuchillas. También previene y elimina las pequeñas estrías.
Cuero cabelludo y cabello
Es excelente para prevenir afecciones como la caspa y la grasa, al aplicar su jugo como champú o acondicionador. Permite lograr un cabello más sano y brillante frotando una hoja, previamente cortada por la mitad, por toda la cabeza y dejándola secar unos minutos.
Alergias
El aloe vera reduce y elimina los efectos de alergias u otras reacciones similares. Antes de todo, para saber si eres alérgico al aloe vera, tienes que frotar un poco en la parte inferior del brazo y esperar. Si la zona empieza a irritarse, señal de que eres alérgico y deberás evitar su uso. Para afecciones respiratorias, como el asma, por ejemplo, debes colocar varios trozos en una olla con agua y ponerla a hervir, respirando el vapor o frotando con su jugo las fosas nasales. Reducirá considerablemente las molestias.
Quemaduras y escoceduras
Al aplicar la planta en la zona quemada o irritada, el dolor disminuye considerablemente, además de contribuir a evitar infecciones y posteriores cicatrices. Acelera el proceso de curación.
Cicatrices
Es un tratamiento que puede demandar un tiempo prolongado. Debe aplicarse el jugo de la pulpa sobre las cicatrices, tanto por la mañana como por la noche, combinándolo con Vitamina E para su mayor efectividad.
Acné
El aloe permite regenerar los tejidos desde el interior hacia el exterior, absorbiendo el exceso de grasa. Durante los primeros días es muy posible que la afección parezca empeorar pero esto es normal y solo requiere paciencia. Debe aplicarse más de una vez al día y con la zona previamente limpia. Utilizándolo regularmente reduce las cicatrices producidas por el acné.
Torceduras y dolor en las articulaciones
Al aplicarlo directamente sobre la zona afectada (en calor o no), es absorbido directamente por la sangre inhibiendo el dolor. Uno de los remedios caseros más utilizados es calentar una hoja, partirla por la mitad y colocar la parte gelatinosa sobre la zona dolorida el mayor tiempo posible.
Sinusitis y dolor de cabeza
Para este tipo de afecciones debe colocarse un trozo de hoja de aloe vera sobre la frente y frotarla suavemente, dejándola actuar unos minutos. Del mismo modo, puede utilizarse un paño empapado en jugo de aloe en la frente. Si las jaquecas son a causa de una sinusitis, es aconsejable que el paño cubra parte de las fosas nasales.
Enfermedades infantiles
En enfermedades que dejan señal como el sarampión, la varicela o la rubeola, extender el jugo del aloe vera reduce la comezón y las lesiones cutáneas se curan más rápido. Todos aquellos tratamientos que impliquen el uso de alcohol pueden ser sustituidos por la planta, ya que es también un poderoso desinfectante y no produce ardor. Para quienes tengan fiebre, deberán frotar la pulpa en la frente, la nuca y la planta de los pies. También es muy útil para las irritaciones causadas por los pañales (después deberá aplicarse una crema hidratante).